Qué menos para devolver ese amor que surge desde los campos de la miseria. Dicho y hecho. El equipo cambió de todo menos de ciudad. Una vez hecho esto el árbitro principal tiene un minuto para hacer la revisión en un monitor de televisión. Las condolencias han llegado también desde, entre otros equipos, el Real Madrid y el Valencia, que esta madrugada ha homenajeado a Jarque con un minuto de silencio en el partido que disputaba, y desde la liga ACB de baloncesto. Los aficionados de los Jazz, de los más ‘calientes’ de la liga, llegarán a ese partido algo más motivados que de costumbre. Nocioni a los aficionados que llenaban las gradas del AT&T Center. De hecho, los aficionados empezaron a acudir al estadio anoche mismo, al poco de conocerse la muerte del futbolista, que ha podido disfrutar escasamente quince días de su nombramiento como nuevo capitán del Espanyol.

Tras la final del torneo, prevista para las tres de la tarde, tendrá lugar la entrega de premios y la clausura del evento. Pero llegaron las mujeres, los potes y los estudios y sus carreras se estancaron. Los cinco mejores jugadores para las ventas de camisetas fueron James y Curry, seguidos por el ala-pívot griego Giannis Antetokounmpo, de los Milwaukee Bucks. Tras alzar el galardón el de Bahía Blanca, figuras de la talla de Jamal Crawford, Lamar Odom y James Harden hicieron lo mismo convencidos de que, en realidad, ayudaban a potenciar a sus equipos. El nacido el 28 de julio de 1977 en Bahía Blanca, más conocido en el mundo como Manu Ginóbili, llegó a la NBA el 18 de julio de 2002, y el 27 de agosto pasado anunció su retirada.

Como en su tiempo lo hizo también el panameño Rolando Blackman, a quien los Dallas Mavericks otorgaron también la distinción de la retirada del número de su camiseta, el primer latinoamericano que lo consiguió en la NBA. Lo reconoció otro legendario de la franquicia tejana, el entrenador Gregg Popovich, quien en el discurso previo a la retirada de la camiseta de «Manu» fue el que mejor definió en toda la noche la figura de Ginóbili. Su indumentaria también muy simple causó furor entre las más llevadas de la competición, con ese toque sedoso y brillante que sólo en la camiseta de Orlando podía quedar tan bien.

El base Kyrie Irving, de los Boston Celtics, ocupó el cuarto puesto de ventas, seguido por el pívot camerunés de los Filadelfia 76ers, Joel Embiid, ambos clasificados con sus respectivos equipos a las semifinales de la Conferencia Este. El objetivo de este videojuego es derrotar a todos los enemigos en cada nivel. Pero desde el club azulgrana niegan a este diario que se haya producido ningún tipo de movimiento en este sentido. Yo era de Johan Cruyff, por el que llevé el 14 durante mi carrera. El escolta Dwyane Wade, de los Heat de Miami, quien se retiró al final de la temporada, concluyó su carrera ocupando el undécimo puesto en la venta de camisetas.